El primer domingo de julio era la fecha en la que los mexicanos votábamos para elegir a un nuevo presidente, pues así lo señalaba la Constitución.
La excepción fue 1994, cuando las elecciones se realizaron el 21 de agosto, pues ese año fue asesinado el candidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Luis Donaldo Colosio Murrieta, el 23 de marzo.
En 2007, se realizó una reforma al artículo 116 de la Constitución, para homologar el calendario electoral de 12 estados con las elecciones federales. Entonces se estableció el primer domingo de julio del año que corresponda para la realización de los comicios.
Pero en 2014, con la nueva reforma electoral, se modificó dicho artículo y en su fracción IV inciso a), se estableció que “la jornada comicial tenga lugar el primer domingo de junio del año que corresponda”.
Así, las elecciones del 2 de junio de 2024 serán las primeras que se realicen con la nueva fecha, en la que, además de las elecciones presidenciales, nueve estados renuevan en comicios a su gobernador.